A menudo, quienes somos se entierran bajo años de experiencias, cambios inevitables y nuestras exigentes responsabilidades. Nos transformamos en lo que necesitamos ser para manejar las situaciones a medida que surgen. Después de tantas molduras, podemos mirar hacia arriba y ni siquiera reconocer a la persona que nos mira fijamente en el espejo.
Esta persona puede haber sido consciente de su entorno. Incluso conocedores de lo que los hacía felices. En general, una persona que estaba en sintonía consigo misma.
Estar fuera de contacto con quienes una vez fuimos puede causar mucho dolor e incertidumbre en nuestras vidas. Obligándonos a abandonar nuestros sueños, a conformarnos con expectativas poco realistas y a perder de vista nuestro propósito.
Es nuestra responsabilidad recordar quiénes somos y qué es lo que nos importa. No dejar que nuestras vidas se salgan de control de una manera que nos convirtamos en alguien con quien no estamos familiarizados. Estos son los pasos que debes seguir para volver a recordar quién eres:
Paso 1: Identificar Lo Que Falta
La sensación que tenemos de que falta algo es la primera señal de que hemos perdido el contacto con quienes somos. Lo que somos de alguna manera se convirtió en lo que éramos. Dejándonos confundidos.
Pero ¿qué falta?
¿Ya no tenemos tiempo para los pasatiempos que alguna vez amamos? Somos incapaces de disfrutar de momentos de paz para nosotros mismos? ¿Nuestros hijos nos han dado el papel de mamá, empujándonos a olvidarnos de cosas que antes nos importaban?
Afortunadamente, lo que te tiene fuera de contacto con quién eres es identificable. Intenta preguntarte sobre las cosas que extrañas. Identifica las cosas que solían hacerte feliz. Recuerda quién eras cuando disfrutabas de las cosas a las que te gustaba prestarte atención. Afinarte en eso te ayudará a recordar quién eres.
Paso 2: Evalúe Cómo Está Midiendo Quién es
Perder de vista quién es a veces se puede atribuir a los estándares que está utilizando para medirse a sí mismo. La forma en que medimos quiénes somos puede estar unida a nuestro estatus, títulos, creencias y mucho más.
En muchos casos, asociamos lo que somos con lo que nos hemos convertido. Tal vez con el tiempo, se haya convertido en madre, esposa, dueña de un negocio, desempleada, madre que se queda en casa, cuidadora u otros títulos.
Estos títulos pueden venir con diferentes emociones, orgullo, decepción y un cambio de identidad.
Una vez que pueda identificar cómo se está midiendo a sí mismo, es posible que pueda cambiar su forma de pensar. Un cambio en tu forma de pensar puede ayudarte a reconocer quién eres.
Paso 3: Elimina Todas las Distracciones
Nuestras mentes están siendo bombardeadas con todo tipo de distracciones a diario. Desde correos electrónicos, mensajes de texto, notificaciones de aplicaciones, recados y casi todo lo demás. Con distracciones constantes, lo que somos se puede difuminar a medida que tratamos de enfocarnos en el caos.
Si te encuentras perdiendo el contacto con quien eres, puede ser el momento de apagar todas las distracciones. Empieza a sentarte en silencio solo. Presta atención a las cosas que te llegan mientras no estás distraído.
Cuando no estás distraído, es posible que te lleguen pistas que pueden ayudarte a recordar quién eres. Este es un momento para tomar conciencia de sus sentimientos, pensamientos y planes.
¿Quién era usted? ¿Quiénes sois? ¿En quién te estás convirtiendo?
Paso 4: Conéctate con tus Seres Queridos
No somos las únicas personas que entendemos y sabemos quiénes somos. Las personas que nos aman también pueden ayudarnos a recordar quiénes somos.
Estas son las personas que probablemente te han conocido toda tu vida. O tal vez estas personas han estado en tu vida por un par de años. El tiempo no importa. Lo que sienten por ti.
Las personas que se preocupan por ti notan cosas de ti que tú no. Pueden notar si has cambiado. Estas personas generalmente pueden ayudarte a recordar quién eres al arrojar luz sobre cómo te ven.
Tener una conversación con alguien que te importa. Hazles preguntas sobre cómo te ven. Habla de tus características positivas. Intenta que te digan si algo sobre ti ha cambiado.
Esta conversación de una fuente de confianza puede ayudarte a recordar quién eres.
Paso 5: Confía En Tu Juicio.
Recordar quién eres se trata de confiar en ti mismo. Aunque es posible que reciba mucha información de sus seres queridos y señales del mundo, quién es usted depende en última instancia de usted.
Usted es el único que sabe por lo que ha pasado y lo que le falta. Para recordar quién eres, debes confiar en tu juicio. Confía en que siempre estás en sintonía con tu verdadero ser.
Lo creas o no, sabes lo que es mejor para ti. A veces, puedes perder de vista quién eres, pero eso no significa que esa persona se haya ido por completo. Quien eres nunca está muy lejos.
Tienes que confiar en que tienes lo mejor para ti. Que puedes adaptarte a cualquier cosa que la vida te arroje sin perderte a ti mismo.
Conclusión
Perder de vista quiénes somos es común. Especialmente cuando hay varios cambios y/o distracciones que ocurren en su vida.
Sin embargo, al tomar ciertas medidas, puede recordar quién es usted.
El primer paso que te gustaría dar es identificar lo que falta en tu vida. Luego, evalúe cómo se está midiendo a sí mismo.
En tercer lugar, descarta todas las distracciones que ocurren a tu alrededor. Luego, conéctese con sus seres queridos porque saben quién es usted también.
Por último, pero no menos importante, confíe en su juicio porque siempre puede acercarse a quién es cuando se siente inseguro y perdido.