no Hay nada peor que jugar un total de 90 minutos y tener los pies en la picadura para el resto de la semana debido a las ampollas. Cuando jugaba al fútbol, desarrollaba llagas severas en los dedos de los pies y en las bolas de los pies todo el tiempo, sin importar las botas que usara. En esta guía, le mostraremos cómo evitar que estas molestas ampollas arruinen su día.
¿Qué causa las ampollas?
Las ampollas son bolsas de líquido entre diferentes capas de piel, a menudo llenas de sangre o pus transparente.
En última instancia, los jugadores de fútbol desarrollan ampollas debido a la fricción entre su calza o calcetín y su piel. El sudor ayuda a exacerbar esta fricción al actuar como lubricante entre el calcetín y la piel. Es por eso que las ampollas se producen en ciertos puntos de presión en el pie donde el calcetín & o la bota & del pie pueden moverse mientras permanecen en contacto entre sí.
Es por eso que marcas líderes como Adidas han comenzado a fabricar calcetines que se adhieren a la parte exterior de la bota mientras corres. Algunos jugadores, como Luis Suárez, usan estos calcetines sobre su atuendo habitual para evitar resbalones cuando lanzan la pelota.
¿Cómo puedo dejar de tener ampollas cuando juego al fútbol?
Dado que correrás y cambiarás de dirección con frecuencia cuando juegues al fútbol, deberás encontrar una manera de reducir la fricción entre el pie y los tacos. Pruebe algunas de las siguientes técnicas y vea si funcionan para usted:
- Compre tacos más ajustados. Tus botas de fútbol no deben moverse cuando corres o pateas la pelota; de hecho, deben ajustarse bastante ajustadas en comparación con tus zapatillas de deporte habituales. Esta es la razón por la que muchos jugadores compran calas de media talla o una talla completa de su talla de zapato regular. Sin embargo, las botas no deben estar demasiado ajustadas, ya que esto puede ejercer presión adicional en ciertas partes del pie, lo que puede provocar la formación de ampollas.
- Consigue mejores calcetines. Busca unos calcetines de fútbol que se parezcan más a la forma de tu pie, como los que tienen un calcetín a medida para el pie izquierdo y el derecho, respectivamente. También hay calcetines diseñados para sujetar el interior de la bota, como las Adidas Traxion (que mencionamos anteriormente), que reducen la fricción al correr.
- Reduzca la sudoración. Los tacos transpirables y los calcetines de fútbol ayudarán a mantener los pies secos y agradables durante el partido. Esto puede detener las ampollas al reducir el impacto del roce.
- Use dos pares de calcetines. Puedes usar otro calcetín debajo de tus calcetines de fútbol normales para reducir la fricción que se transmite a tu pie. La teoría es que el calcetín exterior frota el interior de la calza, y esta fricción se transmite al calcetín debajo (esto puede ser solo un calcetín regular hasta los tobillos) en lugar de al pie.
- Lubrica tu piel. Al frotar las áreas propensas a las ampollas con un lubricante como la vaselina, puede asegurarse de que la fricción que se produce sea suave, en lugar de que el calcetín se frote la piel. El problema con esto es mantener la vaselina en su lugar durante el juego. Si puede, intente volver a aplicar la sustancia en el descanso. De lo contrario, use una tirita fuerte para mantenerlo en su lugar. Es probable que se desprenda durante el juego (dependiendo de la parte de tu pie en la que lo estés usando), pero este método debería ayudarte durante al menos 45-60 minutos.
- Relleno. También puedes tratar de rellenar el área propensa a las ampollas para que el calcetín se frote con cinta adhesiva o una tirita en lugar de la piel. Sin embargo, al igual que con el método de vaselina, esta técnica puede resultar ineficaz si la capa protectora se desaloja a mitad del juego.