Una Orden de Delegación es un documento legal que permite a los representantes electos tomar decisiones financieras y de bienestar importantes en nombre de una persona que ha perdido la capacidad de manejar sus propios asuntos (es decir, Como resultado de demencia, una lesión cerebral o problemas graves de aprendizaje). Se necesita una Orden de Delegación cuando el individuo en cuestión no tiene un Poder Notarial Duradero (LPA, por sus siglas en inglés) ya en vigor.
¿cuáles son los dos tipos de Diputado?
Puede solicitar ser Adjunto de Asuntos Financieros y de Propiedad, Adjunto de Bienestar Personal o ambos. Un Adjunto de Propiedad y Asuntos Financieros se encargará de los activos financieros y físicos de una persona, por ejemplo, sus pagos de alquiler o hipoteca, facturas, inversiones o pensiones, mientras que una Orden de Delegación de Bienestar Personal se relaciona con la administración de decisiones médicas o de atención importante. Si se convierte en Diputado, también debe presentar informes anuales a la Oficina del Tutor Público explicando las decisiones que ha tomado en nombre de la persona en cuestión.
¿Quién puede solicitar ser diputado?
Si tiene más de 18 años, puede solicitar ser Diputado de un ser querido, sin embargo, es importante tener en cuenta que puede haber algunas ocasiones en las que la solicitud de diputado puede ser denegada si el Tribunal considera que sus propias circunstancias personales comprometerán su capacidad para administrar adecuadamente los asuntos de la persona en cuestión (por ejemplo, si tiene una capacidad mental reducida o está en bancarrota).
Solicitar una Orden de Delegación
Usted necesita hacer una solicitud al Tribunal de Protección si está buscando obtener una Orden de Delegación; el proceso implica una cantidad considerable de papeleo, sin embargo, puede nombrar a un abogado para que lleve a cabo la solicitud por usted. Un abogado también podrá proporcionar asesoramiento legal importante y responder cualquier pregunta que pueda tener sobre el proceso.
Solicitar una Orden de Delegación puede ser considerablemente más costoso que concertar un Poder Notarial Duradero, con tarifas iniciales de configuración más altas y cargos anuales continuos durante todo el curso de la Delegación. El proceso también puede agregar angustia y dificultad a un período ya desafiante.
Para obtener más información sobre cómo establecer una Orden de Delegación o un Poder Notarial Duradero, no dude en ponerse en contacto con nuestro especialista en Planificación de Sucesión de Patrimonio Privado &, Hardeep Nijher en [email protected]